El carpaccio de gambas con pesto de pipas y semillas de sésamo es refrescante y muy aromático.
También es ligero, por lo que es un entrante genial para comidas o cenas con numerosos platos o con plato principal potente, como es el caso de los menús navideños o celebraciones familiares.
Como podéis ver, la foto que acompaña esta publicación no es mía si no de La Clandestina.
No es exactamente mi carpaccio pero he tenido problemas técnicos con mis fotos y hasta que no repita la receta, no tengo ninguna mía que mostraros.
De paso, podéis echar un vistazo a este blog donde muestra recetas de su restaurante. Los que vivan por Alicante o sus alrededores pueden pasarse por allí.Yo no he tenido todavía la oportunidad de hacerlo…
Ingredientes
400 gr. gambas
1 manojo de cilantro
2 cucharadas de pipas de girasol
2 cucharadas de semillas de sésamo tostado
6 cucharadas de aceite virgen extra
2 cucharadas de zumo de limón
2 cucharadas de vinagre (de vino blanco, de manzana, de sidra, balsámico…): el color del vinagre condicionará el aspecto final del plato. El balsámico es delicioso pero dará un toque oscuro. La decisión es vuestra.
sal y pimienta negra
Preparación
Pelar las gambas y cortarlas por la mitad a lo largo (si son grandes, cortad de nuevo cada mitad a lo largo por la mitad).
Quitar el hilo intestinal.
Extender las gambas sobre un papel film sin que queden muchos huecos entre ellas. Es más fácil si se hace este proceso en varias veces, por ejemplo con la tercera parte cada vez.
Tapar con otro papel film.
Ahora, ponemos peso encima y aplastamos hasta dejarlo como de unos 2-3 mm. de grosor. Yo suelo hacerlo con la tabla de madera de cortar o con el rodillo.
Guardar cada plancha en el congelador según las vamos haciendo.
Mientras se enfrían, trituramos el cilantro (menos unas hojas que dejaremos para la decoración), la mitad de las pipas, la mitad de las semillas de sésamo, el zumo de limón, el vinagre, aceite, sal y pimienta.
Colocamos las gambas sobre la fuente de servir (o en platos individuales, si preferimos sacarlo ya servido en raciones).
Repartimos el aliño y dejamos reposar unos 15-20 minutos.
Servir decorando con unas hojas de cilantro, unas pipas y unas semillas de sésamo.