La preparación de las empanadas de Halloween es muy sencilla.
Se puede considerar que es un trabajo de manualidades en el que pueden participar los niños.
Aquí os propongo dar forma de calabaza pero podéis dibujar lo que más os guste: sombreros de bruja, calaveras, …
Lo único a tener en cuenta es que tiene que haber una zona más o menos amplia en la que colocar el relleno. Aparte de eso, el límite lo pone vuestra imaginación 🙂
En cuanto al relleno, podéis limitaros a utilizar salsa boloñesa (que puede ser comprada) o podéis añadir otros ingredientes si queréis que sea un bocado más nutritivo. Se me ocurre que, siendo para niños, podéis poner algo de jamón (york o serrano), salami, queso, trocitos de salchicha, etc.
Aquí, la única limitación es terminar siempre con la salsa boloñesa, que es lo que nos interesa que asome por las hendiduras de la masa.
Y nada más.
¿Empezamos?
Ingredientes
masa quebrada o brisa (mejor de las que venden refrigerada)
salsa boloñesa
lonchas de queso (opcional)
lonchas de jamón o de otro embutido (opcional)
Preparación
Precalentamos el horno a 180ºC.
Comenzamos dibujando en un papel, mejor papel de horno, las caras que más nos gusten para las calabazas (se pueden encontrar muchas ideas navegando por internet). Podemos hacerlas del tamaño que queramos. A mi, particularmente, me parece que si la cara ocupa la mitad de un folio es una buena ración.
Las recortamos y ya tendremos las plantillas listas.
A continuación, sobre la masa brisa extendida, colocamos las plantillas y las marcamos en la masa utilizando la punta de un cuchillo. Retiraremos la masa sobrante con cuidado de no deformar las caras.
Para cada empanada necesitaremos 2 siluetas:
– Una silueta completa, sin vaciar ojos ni boca. Esta será la que vaya debajo.
– Otra con los ojos y boca marcados y vaciados. Esta irá encima.
Pincharemos ligeramente la silueta de abajo con un tenedor para evitar que suba al hornear.
Metemos las siluetas inferiores al horno durante 5 minutos.
Las sacamos y colocamos el relleno: jamón y queso, si lo utilizamos, y terminando siempre por la salsa boloñesa, que es lo que queremos que se vea a través de los ojos y la boca.
Es importante dejar un borde de 1 cm. sin relleno. Debe quedar la masa a la vista.
A continuación, colocamos las siluetas superiores y presionamos ligeramente todo alrededor para sellar las dos capas y que no se escape el relleno al hornear.
Metemos de nuevo al horno y dejamos unos 15 minutos, hasta que las empanadas de Halloween estén doraditas.