Todos los que tenemos niños sabemos que el tema verduras no suele ser fácil a veces así que, con la intención de hacerlo más llevadero, se me ocurrió un día la lasaña de verduras y salchichas.
Por un lado combinamos una buena ración de verduras y por otro les ofrecemos uno de sus platos favoritos: las salchichas.
Puede que aún así haya niños que no lo quieran (no demasiados). Si así, no os preocupéis. Los adultos que haya alrededor la comerán con muuuucho gusto. Ya veréis.
Ingredientes
Unos 250 gr. de pencas de acelgas cocidas (la parte blanca)
8 salchichas frescas cortadas en trocitos de unos 2 cm.
100 gr. de queso rallado
6 cucharadas de salsa de tomate (opcional)
Para la bechamel
1/2 l. de leche
30 gr. de harina (1 cucharada sopera colmada)
3 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de mantequilla
sal y pimienta negra recién molida
Preparación
Empezamos preparando la bechamel.
En un cazo a fuego medio ponemos la mantequilla con el aceite. Cuando la mantequilla se ha derretido, añadimos la harina y la removemos bien con unas varillas durante un par de minutos.
A continuación volcamos la mitad de la leche y seguimos removiendo hasta que se integre bien.
Volcamos el resto de la leche, salpimentamos y seguimos cocinando durante varios minutos sin dejar de remover. Reservar.
Aparte, en una sartén antiadherente, doramos las salchichas.
Ya está todo listo para empezar a montar la lasaña.
Extendemos un par de cucharadas de bechamel en el fondo de una fuente de horno.
Colocamos la tercera parte de las pencas de acelga hasta cubrir el fondo.
Repartimos la tercera parte de la bechamel, 3 cucharadas de la salsa de tomate (si la usamos) y, encima, la mitad de las salchichas.
Ponemos encima la mitad de las pencas que nos quedan + la mitad de la bechamel + el resto de la salsa de tomate + el resto de las salchichas.
Cubrimos con el resto de las pencas. Extendemos bien la bechamel que nos quede y repartimos el queso rallado.
Calentar en el horno a 200ºC hasta que quede doradita.