Este pastel de patata y salmón fresco es muy resultón.
Además, ya sabemos que todo lo que venga en brocheta o tenga aspecto de pastel tiene prácticamente garantizado el éxito entre los pequeñajos así que los niños se lo comen encantados.
Váis a ver que se prepara sin demasiadas complicaciones.
¡Os animo a que lo probéis!
Ingredientes
4 o 5 patatas
2 tomates
1 trozo de salmón fresco (unos 400-500 gr.) sin piel ni espinas
1 vaso de leche
100 gr. de queso fresco batido o de nata
3 huevos
sal y pimienta
Preparación
Precalentar el horno a 180ºC.
Cortar las patatas en rodajas finas, como de medio centímetro de grosor (o menos).
Salpimentar y colocarlas en un recipiente apto para microondas, donde las cocinaremos tapadas durante unos 7 minutos. Sacar del micro y reservar.
Cortar los tomates en rodajas finas.
Laminar también el salmón, asegurándonos de que no tiene ninguna espina.
Batir los huevos con la leche y el queso fresco batido (o la nata). Salpimentar la mezcla.
Para el montaje, en una fuente de horno ir colocando una capa de patatas, encima una de tomate y cubrir con salmón.
Repetir las capas y terminar con una capa de patatas.
Volcar por encima la mezcla de huevos.
Colocar la fuente en un recipiente con agua (al baño María) y hornear durante unos 20 minutos, hasta que esté cuajado (lo podemos comprobar fácilmente pinchando con un cuchillo hasta el fondo, que tendrá que salir limpio).
Es una idea estupenda para los peques, el salmón suele gustarles, y el formato pastel casi siempre triunfa…
Me gusta!
Me alegra mucho que te guste.
¡¡Ya verás como a tus peques también!!